El pleno del Congreso aprobó, con 67 votos a favor y en segunda votación, el texto sustitutorio del dictamen de los proyectos de Ley 6341, 7134, 7181 y 7503, que propone derogar la Ley 31143, que protege de la usura a los consumidores de los servicios financieros.
Con ello, se estaría eliminando la norma que fija tasas de interés máximas en el sistema financiero.
La mencionada ley entró en vigor en marzo del 2021, a pesar del rechazo de entidades técnicas como la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS), Banco Central de Reserva (BCR) y gremios de instituciones financieras.
Como lo advirtieron, la ley tuvo el impacto contrario al deseado, no solo excluyó del sistema financiero formal a aquellos clientes con créditos vigentes cuyas tasas sobrepasaban el máximo establecido, sino que también restringió el acceso de nuevos clientes, sobre todo aquellos de menores ingresos.
De acuerdo con el BCR, el nivel de la tasa de interés que cobra una entidad financiera por un préstamo se determina por cuatro componentes, el costo de fondeo, gastos operativos, riesgo de impago y margen de ganancias.
En el caso de clientes con ingresos más bajos y, por lo general, inestables, el riesgo de impago es mayor. Asimismo, estos suelen requerir préstamos de monto más pequeño, por lo que el gasto operativo promedio de la entidad es mayor para estos créditos. Como resultado, las tasas de interés para este segmento suelen ser más altas.
Fuente: Gestión.